Ni uno, ni dos, sino cuatro son los ramos de novia que hoy te presentamos. Ideas para todos los gustos y para todas las mujeres que están a punto de darse el sí quiero. Sin duda, también el ramo puede darnos un poco de quebradero de cabeza. Si bien no es complicado hacer una buena elección, en ocasiones tanto el color como las flores en sí, nos llevan a darle más vueltas de las necesarias. Es por ello que quizás, con ideas tan sencillas como las que te proponemos, las dudas se disipen más rápido.
En primer lugar contamos con un ramo de lo más bonito. En él se refleja uno de los colores básicos por excelencia para todas las novias. El color azul tiene que ser uno de los grandes principales para nosotras. Algunas novias lo llevan en la parte de la liga y otras, en el propio ramo. En este caso, las flores azules en un tono intenso se dejan ver, aunque también destacan otras pequeñas flores en blanco. Las rosas serán siempre una buena elección por todo el significado que implica así como por el romanticismo que siempre las acompaña.
Como no, si hablamos de romanticismo, el color rosa también se une a ello. Sin duda, una tonalidad perfecta para poder lucir en un día tan especial. Las rosas más grandes se unen a otras flores más sencillas y pequeñas. Una combinación que dará lugar a un toque mágico. Puedes hacer una suave mezcla que lleve el tono verde para que no se haga demasiado pesado tanto color rosa. Sin duda, esta idea también se convierte en una gran opción para toda novia, ¿no lo crees así?.
La combinación del color blanco y el amarillo también son perfectos para lucir en nuestra boda. Flores grandes y bonitas que darán lugar a uno de los detalles preferidos por todos. Sin duda, es una opción perfecta para acompañar con un vestido blanco pero aportarle la dosis de color necesaria para triunfar. Sencillez para que el vestido cuente con gran originalidad y protagonismo.
Las novias y bodas de estilo rústico también cuentan con ramos perfectos. En este caso, nos vamos hacia unas ramas secas pero que cuentan con delicadas flores en su parte superior. No es necesario optar por grandes flores como habíamos visto en los ejemplos anteriores, sino que con sencillez y unos colores muy naturales, conseguiremos el efecto deseado.