Aunque siempre se dice que la época de bodas comienza en la primera hasta pasado el verano, siempre hay excepciones. Claro está que cada pareja eligen libremente la fecha que más va con ellos, por eso, las bodas en el invierno también existen y cada vez más.
Claro está que si tu boda es en invierno el look de la novia, variará un poco a lo que estamos acostumbrados, ya que no queremos pillar una gripe por ir más desabrigadas de lo habitual.
Los abrigos serán nuestro más firme complemento para no pasar frío mientras lucimos un look de novia muy elegante. Existen muchos modelos que seguro harán las delicias de toda novia.
Aunque por encima de modelos, el color blanco es el predominante para esta prenda. Suelen ser entallados y con algún detalle elegante a la altura de la cintura o pelo en la zona de las muñecas.
La mayoría se presenta en telas de líneas sencillas y con algún enganche visible para poder sujetarlo como pueden ser botones a lo largo del cuerpo o solo en la parte del cuello, que quedaría como si se tratara de una capa.
Otros, sin embargo, prefieren ocultarlos, quedando los broches invisibles. Éste es un buen ejemplo de ello, ya que por el contrario lo que sí queda a la vista es el bordado que lleva a la altura de la cintura, así como las grandes solapas.
No le restarán protagonismo a tu vestido, sino que se lo añadirán gracias a las colas que suelen llevar. Una idea estupenda para que ni el tiempo pueda estropear el día más importante de nuestras vidas.