Los alfileres eran uno de los regalos que siempre se daban en las bodas, o por lo menos yo así lo recuerdo. Poco a poco se han ido variando estos regalos pero bien es cierto que es un detalle sencillo y que todas hemos llevado alguna vez sobre nuestra solapa. Tanto es así que hoy volvemos a rescatar esta idea pero de una manera un tanto diferente y es que, si estás cansada de buscar detalles y ninguno te convence quizás éste dé en el clavo porque además de tratarse de algo muy común, lo podrás hacer cómodamente en casa y seguro que tus invitados también lo valoran.
Para hacer estos alfileres de boda tenemos que comprar un material manejable como puede ser la llamada goma Eva o el Fimo. Esta última tiene una textura muy parecida a la plastilina que usábamos de pequeños y que con ella podíamos hacer todas las formas que se nos ocurrieran y eso mismo es lo que necesitamos para nuestros alfileres personalizados. En Pinterest nos hemos encontrado con ideas tan especiales como éstas en las que podemos ver cómo los abanicos o los sombreros se hacen con el protagonismo de estas piezas exclusivas.
Por ejemplo, el tablero de idean2ideas que cuentan con creaciones tan especiales como las que estamos viendo. Un símbolo muy femenino en forma de gorros de colores y con detalles florales, al igual que ocurre con los abanicos que también son otra pieza que no puede faltar en los eventos veraniegos. Aquí, en forma miniatura y ataviados con colores muy modernos y llamativos. Sin lugar a dudas, dos opciones de alfileres perfectas para todas tus invitadas. Porque siempre apostamos por los trabajos caseros que no tienen nada que envidiar a otras obras que podemos comprar en grandes tiendas.
La tarta es la protagonista de cualquier fiesta o boda, por eso, no hay nada como llevarnos un trocito de recuerdo. Claro que para que no se nos pase, la llevaremos en el alfiler que vamos a regalar. Una creación muy original que matiysuscosas ha ideado para tu día especial. Si observamos bien el corte de la tarta, es que no le falta detalle para que, aún a sabiendas de que es un regalo, se nos haga la boca agua pensando en el sabor del chocolate y la fresa de la que está compuesta. Ideas para todos los gustos pero desde luego, muy creativas y originales.