Seguro que te suena la tienda de lencería y ropa íntima, Ivette. No es para menos porque llevan ya muchos años alegrándonos nuestro día a día con prendas realmente espectaculares a la par que cómodas. Fue allá por el año 1941 cuando se fue formando la empresa, que contaba con algunas personas, no demasiadas pero siempre con la ilusión por delante y eso es lo que hace grandes a las firmas. Una manera de crear algo nuevo y llevarlo a lo más alto con todas las ganas. De esta manera, podemos seguir disfrutando de colecciones de lencería tan especiales como ésta.
Una vez más son las novias las que hoy se llevan todo el protagonismo gracias a modelos muy completos y que serán de gran ayuda tanto para el momento de la boda como para ponernos muy cómodas una vez haya finalizado, en la noche de bodas. Como no, para comenzar vemos cómo todas las prendas se llenan de detalles muy románticos entre los que se encuentran los bordados de encaje y las transparencias en general. Eso sí, siempre con el color blanco como protagonista indiscutible de este tipo de ropa interior. Solo buscan el adaptarse a tu estilo y a tu cuerpo para que te veas radiante en un día tan especial como es el de tu boda.
Por un lado, están los camisones que cuentan con una falda muy corta y que en la mayoría de las ocasiones no deja mucho a la imaginación, gracias a ese tejido de transparencias. Un guiño al estilo bohemio pero siempre dentro del marco más romántico. Por otro lado, podemos apreciar ciertos detalles que nos harán más sencilla la vida como pueden ser los sujetadores de posiciones que se podrán abrochar según nuestro vestido disponga y como no, las braguitas altas de estilo faja que nos van a ayudar a disimular esos michelines que en un día así tienen que quedarse a buen recaudo.
Tampoco los sujetadores sin tirantes podían quedarse fuera de esta colección porque con ellos podremos llevar siempre todos esos vestidos o camisetas que no llevan tampoco tirantes. Eso sí, siempre acompañados de unos suaves tejidos que lo forman, al igual que en la parte de las braguitas. Lo mires por dónde lo mires, siempre es de gran ayuda que cada una de las piezas, además de aportarnos la elegancia y feminidad necesaria mire por esos detalles que el vestido también exige.