Durante el 2010, regresó una tendencia para las novias que había quedado en el olvido: ¡los guantes! Estos accesorios son sumamente románticos y femeninos, el secreto está en elegir un par que se acomode a tu personalidad y que realmente sume a tu atuendo de novia.
Un par de guantes cortos y en tul, se ven sumamente femeninos y delicados, además, son muy prácticos y cómodos, si además, les añades un moño, lograrás darle a tu atuendo un tono súper delicado y risueño.
Si aumentas un poco el largo de tus guantes, puedes tener unos que vayan unos centímetros por encima de la muñeca… tendrás un look algo más glamoroso, pero todavía cómodo y sencillo de manejar.
Si tu vestido es vaporoso y quieres algo que esté a tono con esa elegancia, opta por unos guantes que vayan hasta por debajo de tus codos.
Estarás cómoda y tendrás la suficiente comodidad para doblar los brazos, y ¡bailar todo lo que quieras! Si quieres unos guantes que sean definitivamente glamorosos y dignos de una princesa (todas las princesas de Disney tienen unos iguales) decídete por unos guantes súper largos que lleguen hasta la mitad de tus brazos.
Puedes usar unos guantes en colores y texturas diferentes al blanco y la seda o el tul… ¿Qué tal unos guantes de cuero marrón flecos? Son perfectos para bodas al aire libre, o para la novia que quiere verse diferente y bohemia.
De la mano de la tendencia del ‘blanco y negro’ en la vestimenta de novia, llegan los guantes negros… te verás muy chic y original.