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Con todo el lío de organizar la boda, los últimos detalles, el fotógrafo y todas las otras pequeñas cosas que nos hacen estar siempre ocupados, no tenemos tiempo para dedicárselo a nuestros invitados. Una vez pasada la boda y ya con todos los regalos entre nosotros, creo que es de bien nacidos ser agradecidos, ¿no?.
Por eso, si te vas de luna de miel, puedes aprovechar tu vuelta, que vendrás relajada, para escribir unas notas de agradecimiento, por esos regalos o detalles que la gente ha tenido con vosotros. En mi caso fue sencillo, ya que no era una boda demasiado grande y pude ir uno por uno, aportando todo mi cariño por los presentes recibidos.
Existen tarjetas tipo felicitación, que podremos aprovechar para escribir en ellas, unas líneas con todo nuestro cariño. Es fácil, solamente tenemos que pensar en esa persona especial que ha compartido con nosotros ese día inolvidable y las palabras saldrán solas.
Usa frases sencillas explicando lo que agradeces ese detalle o incluso, si proviene de una persona muy allegada, puedes intercalar alguna situación divertida para que quede mucho más sentimental.
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