Cristina Tamborero vuelve a la carga con una nueva colección de vestidos de novia. Sin duda, siempre descarga en ellos la gran belleza que una firma como ésta supone. Así que, no es de extrañar que una vez más, podamos disfrutar de nuevos modelos en forma de trajes de lo más románticos. La sencillez y la inspiración de los cuentos de hadas son grandes recursos para Cristina. Así nos lo hace saber gracias a estos ejemplos tan estupendos. ¡Descúbrelos!.
En primer lugar nos vamos a quedar con un traje de novia que cuenta con gran belleza. Parece que las tendencias cubrirán gran parte del modelo. Ya que como inicio del mismo vemos cómo un escote en la espalda es la gran estrella. Junto a él, también hay que destacar la falda de gasa que tiene un movimiento de lo más acertado. Para completar un modelo así, nada como descubrir unas mangas de finos encajes que cubren esta zona con un poco de tul. Por la parte delantera podemos disfrutar de un escote redondo y muy sencillo.
En esta ocasión, nos encontramos con un vestido que también cuenta con una falda de volumen. De esta forma, podremos ir de lo más cómodas en nuestro gran día. Eso sí, para la parte del cuerpo, tenemos un corpiño ajustado y que se termina con unos preciosos tirantes para la parte trasera. Están llenos de brillos, mientras que la zona delantera, se queda con un cuerpo de raso y un brillo más sutil que nunca.
El volumen es una de las características principales de todo vestido de este tipo. La gasa y el tul siempre se dan la mano para crear una combinación de lo más especial. En este caso, también se suma un perfecto volante para completar la parte inferior. Mientras tanto, en la superior descubrimos un cuerpo sencillo que está compuesto por dos finos tirantes. ¿Qué más podemos pedir?.
La falda vuelve a contar con sencillez, pero desde luego no con el mismo volumen. Aún así descubrimos un modelo que lleva el tul en la parte alta del escote. Una manera perfecta de crear un nuevo vestido para novia. Transparencias y delicados bordados se encargan de añadir la sensualidad y el buen gusto de cada una de las novias que lo lleven. Parece que Cristina Tamborero ha acertado de lleno. ¿No lo crees así?.