Una temporada más, siempre expectantes ante la colección de la diseñadora Vera Wang y ha llegado. Sabemos que la innovación está siempre presente en sus creaciones y que las novias dan la bienvenida a modelos rompedores con una mirada hacia el futuro.
En esta nueva colección de novia, dejaremos atrás el color rojo y nos encontraremos dos colores básicos: el blanco y el negro. Un contraste que puede aparecer en el mismo vestido, con un corpiño de color negro que deja paso a una falda de gran volumen en blanco o quizás, mucho más sencillo es un vestido recto blanco acompañado de guantes en negro.
Desde luego este complemento, los guantes para novias, los veremos en todo el desfile, como en el siguiente modelo que consta de un vestido también bicolor, con corpiño ceñido palabra de honor y falda lisa en blanco.
Los corpiños cobran vital importancia y así mismo, pueden aparecer con encajes, tanto en la parte superior del escote como en la inferior, eso sí, siempre y cuando combinen ambos colores. Las faldas con gasa se presentan mucho más románticas y como no, sofisticadas.
Los dos colores no solo se presentan en los corpiños como hemos mencionado hasta ahora, sino que, este modelo comienza con una amplia franja en color negro desde el escote hasta el final de la falda. Un armonía simple y muy elegante.
También hay vestidos de corte vintage y otros en los que no faltan los bordados o las transparencias para aportar mayor feminidad al traje. Una creatividad máxima centrándose solo en dos colores tan sencillos.
En este último modelo el color negro solo se deja ver en la parte del sujetador, dejando que el blanco sea el protagonista del resto del vestido. Espectacular y rompedora, sin lugar a dudas.