Está claro que la firma Ronald Joyce siempre cuenta con los vestidos para novia más elegantes. De ahí que si estamos ante una nueva colección de la firma, ya nos vamos haciendo una ligera idea de todo lo que no vamos a encontrar en ella. Vestidos de novia perfectos donde el glamour y el estilo se consiguen con solo verlos durante unos segundos. Desde las formas rectas hasta las que cuentan con más volumen, saben cómo deleitarnos una vez más. Si no te lo crees, tan solo tienes que descubrirlo por ti misma.
Por un lado los vestidos rectos y de corte sirena son los verdaderos protagonistas de las dos primeras ideas. Primero, se trata de unos detalles brillantes para cubrir todo el modelo, combinándose con un escote de fantasía y un cinturón de pedrería que también nos deja su visión más glam. A su lado vemos cómo la media manga de encaje nos lleva a un modelo lleno de romanticismo que además, vuelve a contar con la misma forma recta y como no, compuesta de más bordados.
Claro que si hablamos de romanticismo, nos quedamos con un nuevo modelo recto lleno de bordados se aparece con máxima elegancia y glamour. Además, de nuevo estamos ante un diseño que cuenta con un cinturón perfecto para terminar un vestido tan ideal de Ronald Joyce. El corte corazón en la parte del escote siempre apuesta por la gran belleza de la novia.
Para este nuevo modelo se van a combinar los mejores detalles que pueden crear un vestido de novia. Por un lado, el tejido que en esta ocasión se combina con el tul. Además los bordados se instalan en gran parte del traje para terminar en la zona del escote con una sutil pedrería y unos tirantes a juego. Otra de las grandes belleza que nos encontraremos en esta firma.
Doble capa de gasa se junta para crear un vestido de novia como éste. Una manera de ver cómo un vestido princesa se apodera de esta colección. Junto a ella, también los detalles brillantes comienzan a hacer acto de presencia en la parte de la cintura para seguir por todo el cuerpo hasta cubrir el escote de tul.
Los tirantes de tul se unen a la parte baja de la falda porque también está compuesta de este tejido. Claro que sobre él también podemos ver de nuevo cómo los bordados se van apoderando de él pero siempre de manera sutil. La pedrería se convierte en un perfecto cinturón para terminar un vestido como éste.