Una de las preguntas básicas es si se tendrá hijos o no, hay que saber bien cuáles son los intereses comunes y si contamos con un apoyo económico holgado para poder permitírnoslo. En cuanto a las tareas de la casa, también hay que dejar claro, que si hablamos de parejas, estamos hablando de dos, por lo que es importante saber que ciertas cuestiones tienen que resolverse en común.

 

 

Siempre se deben de repartir las tareas, porque si no, uno solo puede verse desbordado. Hay que escuchar siempre al otro e intentar animarse y consolarse mutuamente ya que cuando dicen que la vida, al casarte, te cambia…en algunos aspectos, claro que cambia, pero no tiene porqué ser algo frustrante, solo es cuestión de acostumbrarse.

 

 

Respetar los gustos y sobre todo, la base está en la comunicación y sinceridad. No intentes cambiarlo, ya os conocéis y cada uno deberá de tener su espacio cuando lo necesite. No hay trucos, solo consejos para que nuestra vida matrimonial vaya siempre por buen camino.