Se amontonan las ideas de regalos para los invitados pero muchas veces no nos decidimos porque son tantas las cosas que nos gustan que todas nos parecen perfectas. Queremos que nuestros invitados queden satisfechos, tanto con la boda en general como con los regalos en particular y por eso, no hay nada como uno personalizado y original. Seguro que de esta manera tendrán ese recuerdo más especial y como no, lo mejor para ello es algo que puedan usar para que tengan a los novios más presentes que nunca. Son varias las bodas en las que el recién estrenado matrimonio nos agasajó con un detalle como éste.
Las chanclas son esa opción especial que podremos usar tras la boda y seguro, que hasta nos sacarán de algún apuro. Claro que muchas otras personas optan por guardarlas como recuerdo…eso ya es solo cuestión de gustos. Lo primero que tenemos que hacer es ponernos en contacto con algún proveedor para que nos dé la información necesaria para poder adquirirlas. Hay numerosas páginas de internet donde venden este tipo de calzado a un precio muy asequible y que, seguramente entrará dentro de tu presupuesto.
Lo mejor es optar por unas chanclas de colores muy claros como el blanco o los tonos pastel para que los dibujos y los nombres que se escriban se vean mucho mejor. Como podemos apreciar en las imágenes, hay todo un universo de ideas, ya que podrás poner el nombre de los dos en la misma chancla o uno en cada una de ellas y acompañarlo por algún detalle que realmente os defina. Además, no podemos descartar esas frases graciosas o unos bonitos corazones que siempre son la señal de cualquier relación de pareja. Entre los dibujos, podrás añadir alguno de una pareja o quizás, pintar la base con una camisa y otra, con un vestido, simbolizando así a ambos.
Si no quieres complicarte la vida, lo mejor es que elijas chanclas de un par de colores, de diferentes números cada una y los coloques en alguna cesta vistosa. Una vez finalizado el baile, cada invitado pasará a recogerlas según su número de pie. De esta manera, estarás ofreciendo a tus invitados un calzado que podrá usar en numerosas ocasiones veraniegas. Es mucho más sencillo, pero claro está, no es un detalle personalizado como los anteriores. Como siempre hay ideas para todos os gustos, aquí os dejamos ambas.