Quizás no sea considerada una tradición en sí, pero últimamente, en todas las bodas que he asistido hacen una especie de ceremonia durante el banquete que tiene como resultado dar un regalo a esas parejas que llevan muchos años juntos, pero que no han tomado la decisión de casarse.
Si tú tienes amigos así, toma nota de estos sencillos consejos, ya que vamos a sorprenderlos. Una vez que hayamos terminado de comer, comienza el momento de dar los regalos a nuestros invitados, a todos. Cuando esto finalice, es un buen momento para hacer nuestra pequeña sorpresa, ya que nadie se lo va a esperar.
Necesitas un poco de música y te levantarás con tu recién estrenado marido dando vueltas por las mesas y…¡tachán!, te pararás delante de esa pareja de amigos, a quien estás invitando a dar el paso. Para ello, tendrás que sellarlo con algún detalle ingenioso.
Puede consistir en los muñecos de la tarta o una réplica del ramo de la novia. Pero si estas ideas no te parecen atractivas, puedes obsequiarlos con unos bolígrafos con forma de pollo imitando a los novios o una pareja de ranitas, vestidas para la ocasión. Algún día subiré las que me dieron a mi.