En todas las colecciones que estamos mostrando, a las modelos les sientan estupendamente bien los vestidos…claro está que a ellas no se les nota ese michelín rabioso que sale cuando uno menos se lo espera, o la barriguita sexy que tenemos. Por eso, hartas de ver tan poca carne, hoy os presentamos unos modelos más modernos para nosotras, las gorditas.
Aunque muchas mujeres optan por hacer dieta antes de la boda, a otras no nos preocupa demasiado, ya que, lo que se pretende es ser una misma, solo necesitamos encontrar el vestido que nos haga sentir más cómodas. Comenzamos con un vestido corte imperio, de doble falda y escote asimétrico.
Falda recta plisada con escote halter, nos va a favorecer… y mucho. Si eres un poco ancha de hombros, este vestido de tirantes irá estupendo para disimular esta zona. Además, la falda al ser lisa nos hará vernos más estilosas.
Si nuestro problema está básicamente en la barriga o zonas de alrededor, atrévete con este modelo de palabra de honor que termina con un escote corazón, acompañado de un corsé con bordados y una falda evasé.
Si eres gordita pero también bastante alta, entonces podrás lucir algún vestido como éste, con drapeados en la zona central, acortando un poco la figura y volviendo a disimular los hombros anchos, gracias al encaje que los tapa.
Otra opción, es dejar el escote al aire, al igual que los hombros y optar por un vestido ceñido hasta la cadera, para dejar paso a una falda con volantes, que combina a la perfección con el drapeado del cuerpo.
El corte imperio sigue estando muy presente para novias modernas y que quieren restar algún kilo de más. Un vestido sencillo con solo un aplique en forma de flor, puede llegar a parecer mucho más sofisticado. ¿Quién dijo que no podíamos estar de lo más sexy y orgullosas de nuestro cuerpo en un día como nuestra boda?.