Stella York nos muestra sus nuevos vestidos de novia que no dejarán indiferente a nadie porque a la vez de ser muy románticos también cuentan con pinceladas de color que ya hacía un tiempo que no veíamos. Para definir esta nueva colección no hay nada mejor que decir que la elegancia está por encima de todo, así como los modelos muy sensuales y románticos. También me atrevería a mencionar que en ocasiones se basan en unos vestidos muy juveniles y con alguna que otra pincelada vintage. Todo un mundo de características que unidas entre sí, da lugar a creaciones tan especiales como los modelos que podemos apreciar.
Cada modelo lo podrás encontrar en color blanco y marfil, así que si te gusta el vestido no hay de qué preocuparse. Para comenzar lo haremos con uno muy de estilo princesa y que cuenta con un corpiño de estilo corazón que lleva una fina tela llena de drapeados para dejar una falda de vuelo en gasa con ciertos volantes, muy sencillos pero también muy elegantes. A su lado, un vestido en color rosa, que como decíamos al comienzo de este párrafo, también lo encontrarás en otras tonalidades. El escote corazón va unido a un corpiño que termina con un sencillo cinturón de pedrería.
El vestido de corte sirena está de enhorabuena gracias a este modelo que cuenta con pinceladas de color entre tantos bordados haciendo de él un modelo básico con corte vintage pero muy moderno gracias al escote también de corazón. La suave tela que protagoniza la falda cuenta con gasa y un ligero volumen lo que le da al vestido más elegancia, si cabe. Como los tonos pastel son los que protagonizan esta colección no hay nada como combinarlos con un ramo de novia de igual forma.
Porque no solo de gasa viven los vestidos de Stella York sino que también las telas satinadas cuentan con un gran protagonismo y éste se hace notar en un vestido tan original como éste. Una silueta entallada en la que los bordados se hacen con el cuerpo del mismo, dan paso a un escote en la espalda y a una cola que también los lleva creando una elegancia máxima. Con un vestido así, tan romántico y sensual, puedes llevar la melena suelta u optar por algún moño bajo que le dé más vida a este tipo de escote trasero que tanto nos gusta, y no es para menos.