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La mayoría de los mortales tenemos que pasarnos horas haciendo cuentas para poder tener una boda como esperamos. Nuestros famosos, como no tienen problemas de dinero, se lo montan a lo grande.
Una de las bodas más caras de la historia fue la de Liza Minelli y David Gest. Se casaron en el año 2002 y contó con unos 500 invitados. Todo un lujo, con padrinos de excepción y un coste de 3.5 millones de dólares. Un gasto excesivo para un matrimonio que solamente duró un año.
Otra de las bodas por excelencia ha sido la de Tom Cruise y Katie Holmes. La ceremonia se realizó en un castillo italiano con mucho romanticismo y dinero de por medio. Un total de 2 millones de dólares se gastó el matrimonio, incluyendo una gran fiesta para todas sus grandes amistades.
La bella Elizabeth Hurley y Arun Nayar se dieron el sí quiero bañados por unos tres millones de dólares para una boda que duró unos ocho días.
Unos caprichos reservados solamente para unos pocos. ¡Qué mal repartido está el mundo!
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